
Una mujer que regresaba a Nueva York en la madrugada de hoy, fue acusada de interferir con la tripulación de un viaje aéreo luego que supuestamente intentó abrir una puerta de un avión a 37,000 pies de altura, informó el FBI.
Harry Rodríguez, portavoz del Negociado Federal de Investigaciones (FBI, en inglés), dijo que Esther Pérez, de 46 años, estaba a bordo del vuelo 708 de la compañía aérea JetBlue que salió de San Juan alrededor de las 2:00 a.m. cuando ocurrió el incidente.
Según las autoridades federales, cuando el viaje llevaba una media hora de vuelo y volaba a unos 37,000 pies de altura, Pérez, supuestamente...
...se desabrochó el cinturón de seguridad, se levantó de su asiento y corrió hacia la parte delantera del avión diciendo “más o menos” que tenía que salir del avión.
Un asistente de vuelo confrontó a la pasajera y le dijo que regresara a su asiento. Pérez, supuestamente empujó a la asistente de vuelo y agarró el tirador rojo de la puerta principal del avión intentando abrirla, según la versión oficial.
Cuando la asistente de vuelo vio lo que hacía Pérez gritó pidiendo ayuda y la mujer fue controlada por otra asistente de vuelo y algunos pasajeros.
Como resultado del incidente, el piloto decidió que no era seguro continuar el vuelo y solicitó permiso para regresar al Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín en donde aterrizó cerca de las 3:00 de la madrugada.
De ser hallada culpable, Pérez enfrenta hasta 20 años de cárcel.
Rodríguez no quiso comentar si la mujer, que es residente de Nueva York, sufrió algún percance emocional.
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